Ya es suficientemente duro tratar de mantener los kilos de más cuando no se está embarazada, pero afortunadamente, no es tan difícil mantener el exceso de peso cuando se está embarazada, especialmente si se siguen estos pequeños consejos:
- No saltarse las comidas.
- Preparar por la mañana todas las comidas que se van a hacer durante el día para evitar la improvisación y caer en la tentación de comer alimentos que no le convienen.
- Escoger alimentos altos en fibra y bajos en azúcares y grasas.
- No comer alimentos fritos. Hacerlos al vapor, asados o cocidos.
- Comer antes de ir de compras. No hay nada peor que comprar con el estómago vacío, ya que se podría caer en la tentación de comprar alimentos “prohibidos”.
- Al asistir a una fiesta o cualquier tipo de reunión social, comer antes de asistir. De esta manera, no se verá tentada a comer alimentos que estén en su lista de “prohibidos”.
- Comer lentamente. Esto le hace sentirse llena antes y evitará comer en exceso.
- Beber mucha agua. Unos 8 vasos al día.
- Por alguna razón, hay personas que aconsejan a las mujeres embarazadas comer mucho “por dos” y que pueden comer de lo que quieran. Haga caso omiso a estos erróneos consejos.
