A partir de los siete meses de embarazo, el bebé tiene una ajetreada vida intrauterina, con mañanas de descanso y tardes y noches de mayor actividad. Echemos un rápido vistazo al comportamiento del bebé según la hora del día:
Por la mañana: Es cuando está más tranquilo. Duerme de una forma activa, sueña, sus párpados están cerrados, pero, aún así, sus ojitos se mueven y se agita de un lado a otro, aunque también puede dormir sosegadamente.
Por la tarde: Ahora está más despierto y alerta, y es el mejor momento del día para aprender sobre sí mismo y su entorno. Puede que se chupe el dedo, doble los deditos de los pies y haga muecas. Le gusta jugar con su cordón umbilical. También se toca la cara y le gusta sentir el líquido amniótico que le rodea. Estará alerta para recibir las caricias de su madre y responder a ellas (es el momento ideal para practicar ejercicios de estimulación prenatal con el bebé).
Por la noche: Estará muy activo hacia media noche. Es como un pequeño gimnasta: da patadas, se gira e incluso pega saltos! También se mueve de un lado a otro, no para!