Lo dicho, muchas mujeres embarazadas también sufren problemas relacionados con el vello corporal. El embarazo se caracteriza por sus altos niveles de estrógeno y progesterona, y esto puede causar un aumento en el crecimiento del vello: en la cara, alrededor de los pezones, en las piernas o los brazos e incluso, algunas mujeres embarazadas, experimentan un aumento de vello en el vientre.
En todos los casos se trata de una alteración hormonal normal, dando lugar a períodos de aumento (lo más habitual) o todo lo contrario, períodos de caída del vello corporal “Como en mi caso, me quedé, en mis dos embarazos, casi si vello corporal… y era una gozada, a penas me depilaba!”